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miércoles, 11 de julio de 2012

Bajoques farcides (arroz cocido dentro de un pimiento)


Una de las ventajas del verano berlinés es que no me da pereza encender el horno. A decir verdad, en Sevilla también lo encendía en verano, aunque eso significara ponerme a sudar como un pollo. Me gusta el horno, creo que es mi forma preferida de cocinar, aunque siempre (¡siempre!) me queme, y aunque me entre mala conciencia pensando en la factura de la electricidad que me va a llegar a final de año.

Encontré esta receta en lo de Blog Appétit, y me sonó a plato cien por cien tradicional, cocina mediterránea de la buena, así que no esperé mucho para probarla. Y se ha convertido en un greatest hit en casa. En primer lugar, por el sabor: el arroz se cuence en el horno, absorbiendo el jugo del pimiento, y esto sumado al azafrán le da un sabor exquisito. Además los pimientos se preparan en un momento, y luego se meten al horno y se dejan cocinar ahí mientras tú te dedicas a otras cositas. Y por si fuera poco, me parece una receta bastante equilibrada desde el punto de vista nutricional: verduras, hidratos de carbono, un poco de proteína, y muy poca grasa.

Por otra parte, el arroz queda tan rico que creo que se puede obviar la carne, sin más, y convertirlo en un plato vegetariano. En las dos versiones (vegetariana o carnívora) es una receta apta para celíacos.


También he visto en algunos blogs que se puede quemar la piel del pimiento crudo con un soplete o con el fuego de la cocina (si tenéis cocina de gas) para retirarla antes de asarlo. Creo que puede ser una buena idea si disponéis del instrumental necesario. Yo no lo tengo, y no lo he hecho nunca. Nosotros quitamos la piel a medida que vamos comiendo el pimiento. Pero tampoco seguimos grandes protocolos  en la mesa, la verdad...

El único defecto que podría ponerle a esta receta es que necesita mucho tiempo de horno. Cuando aso estos pimientos sólo para dos personas acabo con cierto cargo de conciencia por el gasto energético que conlleva. Pero la solución es fácil: invitar a los amigos a cenar y hacer muchos pimientos para compensar. Además, seguro que los invitados se van a quedar boquiabiertos.


Ingredientes (para dos personas con mucha hambre):

  • 4 pimientos grandes de asar (yo he usado rojos y amarillos)
  • 1 cebolla grande
  • 2 dientes de ajo
  • 200 g tomate triturado
  • 140 g arroz redondo (en Alemania yo uso el que venden como Milchreis)
  • 300 g de carne picada (mezcla cerdo y ternera)
  • azafrán (yo he usado en hebras, dos pizcas generosas)
  • sal
  • aceite


Cómo preparar estos bajoques farcides:

Ponemos el horno a precalentarse a 200 ºC.

Picar la cebolla y el ajo bien finitos y sofreírlos en una sartén con un poquito (un par de cucharadas) de aceite.

Añadimos la carne picada, separándola bien con la espátula para que se fría en trocitos muy pequeñitos.  Sazonamos con la sal.

Agregamos ahora el arroz y el azafrán, y removemos. Incorporamos por último el tomate triturado, lo mezclamos todo bien y apagamos el fuego.

Lavamos bien los pimientos. Hacemos un corte alrededor del tallo, de manera que tengamos un orificio por el que rellenar el pimiento, y que el tallo nos sirva como tapadera. Sacudimos el pimiento para sacar las semillas, enjuagamos bajo el grifo y escurrimos bien el agua que haya podido quedar dentro.

Repartimos la mezcla de carne y arroz entre los pimientos, sin llenar los pimientos del todo, porque el arroz al cocerse aumentará de volumen y se puede salir. Tapamos con los tallos y disponemos en una bandeja apta para horno.


Horneamos a 200 ºC, con las resistencias de arriba y de abajo, durante aproximadamente una hora, hasta que el arroz esté tierno (podéis sacar un poquito de uno de los pimientos para comprobarlo). Durante este tiempo, vamos girando los pimientos sobre sí mismos, para que se asen igual por todos lados. Una vez que el arroz está cocido, sacar los pimientos del horno y servir.


5 comentarios:

  1. Pues tiene muy buena pinta. Fíjate que a mí, lo de asar los pimientos al horno siempre me parecía una tarea lenta y entre eso y, como dices, el cargo de conciencia, siempre la desechaba. Pero viendo la pinta de este plato, igual me animo... aunque quizás en otoño...

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    1. Yo comprendo que ahora mismo en Sevilla hay que sentirse un poco mártir de la cocina para tener el horno encendido durante una hora. Pero te puedes guardar la idea para la cena de celebración del fin del verano-infierno ;)

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  2. Para mi esto es nuevo.. tiene una pinta excelente!, me encanta el relleno y me chiflan los pimientos asados, una receta super interesante, Eli, pinta rica riquísima

    Besos

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    1. La cocina tradicional española, que muchas veces es mejor que la mayoría de los inventos moderniquis que tanto nos gustan por la blogosfera. ¡Si es que nuestra herencia gastronómica es riquísima!
      Besos

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